Presiona enter para ver los resultados.

Meta avatar Anónimo - #55704   July 9, 2023, 7:43 p.m.
Hola Nathy, te escribo esta carta con la intención de que exista sin ser leída. Sé que puede resultar contradictorio, pero lo comprenderás al finalizar su lectura. Yo te ame, y sé que la palabra "amor" a menudo ha sido malinterpretada por la cultura y la fugacidad de las conexiones. Sin embargo, apunto a su significado platónico como ideal de perfección y belleza, que a su vez alude al alma. Que es aquello que nos acerca al bien y nos une, como una gota en medio de un río. No obstante, soy consciente de lo absurdo de esta afirmación, ya que nada garantiza su verdad. Aun así, creí fervientemente en ello. Cuando te conocí, mi existencia estaba fragmentada. No sabía que era real o irreal. Todo a raíz de un sueño que cambió el rumbo de mi vida. Desperté amargamente de esa ensoñación y me encontré con una serie de eventos predestinados. Y no es casualidad que utilice esa palabra, ya que gran parte de nuestro libre albedrío es solo ilusión. Desde lo más banal hasta lo más importante, somos el resultado de causas que lo determinan casi todo, y a eso lo llamamos destino. Equivalentes a personajes en una historia escrita, siguiendo diálogos y situaciones que desconocemos. Puesto que siempre he creído que habitamos entre máscaras, interpretando ficciones en un gran teatro hasta nuestro último día. Fue un martes, una semana después de mi cumpleaños. Me encontraba en la biblioteca con la intención de irme a casa. Sin embargo, algo me llamó para que regresara al club y me despidiera de mis compañeros. Fue entonces cuando te vi. Pensé que no volvería a encontrarte desde aquella noche. Mi corazón se alegró al verte, con aquellos ojos que permanecían en mi memoria. Con el tiempo, comenzamos a salir juntos y, siendo honesto, eso no era algo que esperaba. Debo admitir que no me sentía preparado. Todavía tenía heridas abiertas que se transformaron en miedo y desconfianza. No era inseguridad hacia ti, sino a los acontecimientos que estaban más allá de todo control y previsión. Como resultado, te lastimé y eso también me hirió a mí. Caí en desesperación, y cuanto más actuaba, peor se volvían las cosas. Me encontré en una encrucijada en la que parecía que no importaba la opción, siempre era la incorrecta. Debido a que antes había experimentado situaciones análogas. Puesto que en el pasado mi mundo era sencillo. Parecía haber un orden y propósito en todos nosotros, pero eso se desgarró. Entonces me encontraba inmerso en el caos de la vida, obligado a tomar decisiones. Sin embargo, ¿qué es la libertad si te la imponen? Y, sobre todo, ¿existe un camino idóneo o solo vagamos en tinieblas? Ya que se nos insta a buscar consejo, pero ¿por qué la misma acción o vivencia puede tener resultados tan dispares en diferentes personas o circunstancias? ¿No debería ser igual para todos? ¿Qué me garantiza certeza cuando parece que no la hay? ¿Acaso lo real es paradójico? Y aun con mis esfuerzos y errores, me di cuenta de que el libre albedrío puede ser inhumano. No podemos prever ni controlar todas las variables que están detrás de cada suceso. Nuestro comportamiento es simplemente el resultado de una compleja ecuación que está más allá de nuestro entendimiento y que lo determina todo. Y hasta cierto punto somos un resultado matemático, un numero perdido en el infinito. No obstante, no me arrepiento de haberte amado, y sé que también cometiste errores conmigo. Pero ¿quién no los comete? Y no puedo negar que te extraño, especialmente aquel momento en el que compré un par de anillos y fuimos juntos a un altar. Ese recuerdo permanece vívido en mi memoria y no se desvanece. Porque durante todo este tiempo te busqué de forma incansable, hasta el 25 de marzo. Sin embargo, ese día resultó fatídico cuando comenzaste a gritar y apareció un grupo de personas que intentaron hacerme daño. Al final, me había convertido en enemigo de tus padres. Pero, contrario a su pensar, no te buscaba porque creyera que me pertenecías, sino porque quería tener fe en que se podía desafiar el destino y resistirnos a él. Deseaba creer en mi corazón y en el poder del deseo, en que, en medio de este mundo caótico, dos locos se encontraron en su propia locura. Dos personas mal de la cabeza que se despojaron de sus máscaras para caminar desnudos frente a este gran teatro de la vida, sin ropa que nos cubriera. Y con luces apuntándonos solo para sonreírles al público. ¿Quién soy yo?, ¿Quién eres tú? Y, ¿Por qué somos cuando pudimos ser nada? Te amo.
0 0