Hace mucho tiempo conocí a la chica ideal que todos deseamos, inteligente, amable, muy hermosa y con una humildad gigante. Una simple sonrisa delataba toda su inocencia y demás cualidades que la hacían ver única. Admito que me hubiese gustado mucho ser algo más que su amigo pero lastimosamente no me sentí digno de una mujer tan maravillosa como ella, razón por la que dejé de frecuentarla.
Escribo esta confesión con el único fin de hacerle saber a esa persona cuyo nombre es Sueanny, actualmente Ing. Mecatrónica, que deseo mucho su felicidad porque se la merece y que quién esté destinado a compartir junto a ella sepa ver claramente el grato honor que significa ser parte de la vida de una gran y valiosa mujer como tu 😊😊😊.