Desde que te conocí supe que ocultabas algo triste, me transmitías inseguridad y necesidad de aprobación con tus ojos; y cuando te conocí más, algo en mí dijo "sé su amigo, ayúdalo", a partir de allí todo fue una estrategia sutil mía para que tomases confianza en ti mismo y te dieses cuenta de que te merecías más de lo que tuviste en tu "vida" pasada. No tienes de idea de cuántas cosas ideaba para hacerte un poquito más feliz indirectamente, llegué a preocuparme por tí más que por mí, porque sabía que no eras capaz de ciertas cosas. Sin embargo, el día en que pasó lo que pasó, al darme cuenta de que no tenías ni idea de todo lo que he mencionado, noté que era yo quien realmente necesitaba esa ayuda, pero tú nunca lo ibas a hacer por mí.
No te mentí, solo quería ser como los demás, solo quería que alguien también se preocupase por mí, que me dé consejos; quería muchos amigos y tener una pareja con quien pasar fuera de casa; quería ayuda y quería ser tu mejor amigo.